Dicen que las grandes oportunidades se presentan solo una vez en la vida, por lo que no hay que desaprovecharlas. La historia de Anuar Safuan Fleitas es de esas en las que el destino pone a prueba tu fortaleza para superar las complicaciones y, al final del camino, encontrarte con una última oportunidad.
El paraguayo de 20 años, que estaba siguiendo la carrera de Derecho en la Universidad Católica (UCA), tuvo que atravesar momentos complicados para finalmente acabar celebrando la obtención de una beca en la Eastern Oklahoma State, donde seguirá la carrera de International Business.
La noticia se la dieron hace apenas unas semanas y luego de que cayeran, en cuestión de días, dos ofertas de universidades cuyos entrenadores habían quedado encantados con su talento en el Showcase de febrero pasado.
¿Qué fue lo que sucedió? “La universidad de Lindsey Wilson me había ofrecido beca completa y la de Fort Hays una que cubriría el 80% de los costos. Cuando me dijeron 100% ni siquiera dudé, dije que sí de inmediato”, comenzó relatando Anuar, para acotar luego que “lastimosamente, esa beca cayó”.
Ante esta situación, Anuar volvió a conversar con el entrenador la universidad de Fort Hays, a quien explicó lo que había sucedido con la primera oferta para luego preguntarle si aún estaban interesados en becarlo. La respuesta fue afirmativa, pero “razones ajenas a la organización también cayó a los pocos días de irme”, recordó.
Fue en ese momento en que el paraguayo entró “en una etapa muy difícil”. “Me desanimé bastante. Las últimas semanas fueron difíciles. Pasé momentos muy feos. Me sentía impotente… La impotencia estaba. La incertidumbre, por sobre todo. El esperar una respuesta… Eso fue lo que me puso más nervioso, el hecho de tener que esperar respuestas de la universidad”, agregó.
Pero como el destino no se había rendido con él, llegó una tercera oportunidad. En este caso, de la Eastern Oklahoma State, cuyo entrenador también dio cuenta de las muy buenas condiciones futbolísticas de Anuar.
“Fue así cuando, hace apenas unas semanas, me llamaron de Becas USA para avisarme que había una nueva posibilidad. Me ofrecían una beca súper buena, con algo así como el 91% de cobertura. Me enviaron la nota oficial de que me querían en esa facultad y resucité de la nada, porque no tenía esperanza, estaba muy bajoneado. Pero surgió esto y todos volvimos a estar felices”, relató.
El semblante de Anuar Safuan cambió. La alegría volvió a reinar en su entorno, aunque la idea ya sin vuelta atrás de tener que dejar a la familia comenzó a complicarle el sueño: “Voy a extrañar mucho a mi familia, soy muy familiero, me encanta estar con ellos. Pienso que la familia es lo más importante en la vida y que sin ellos no soy nadie”.
En ese instante suspiró profundamente y se refirió especialmente a sus tres hermanos, Jalil, Amara y Omi. “No puedo vivir sin ellos”, reconoció, para luego asegurar que “nunca” se imaginó “una vida sin ellos”. “En los últimos días me puse a reflexionar y realmente todavía no caigo en que no voy a estar con ellos en los próximos años”, recalcó.
Sin embargo, Anuar optó por cortar momentáneamente ese lazo sanguíneo porque este fue siempre su “sueño”: “Es lo que siempre quise, jugar al fútbol, y a la vez estudiar”. “Es difícil hacer esto en Paraguay, jugar y estudiar a la vez. Eso hay que recalcar también porque, ya sea por la presión de la familia u otras razones, no se puede. Entonces, ahí se corta un sueño”, añadió.
Al describir las emociones que lo invadían horas previas al viaje, Anuar Safuan habló primeramente de una “ansiedad” intensa, luego de “felicidad, porque pasé muchos momentos difíciles y por fin se concretó esto”. “Los últimos días pasaron muy rápido, me voy muy feliz y ansioso a la vez”, reconoció.
Así, quien durante los partidos del Showcase debió sacrificar sus puestos habituales (enganche o delantero) para cubrir otros espacios en defensa, describió como “una oportunidad muy grande a la que no podes decir que no” la que ofrece Becas Deportivas USA a los jóvenes paraguayos.
“Los amantes del fútbol no pueden siquiera esquivar esto, si saben que hay una posibilidad de que entrenadores de Estados Unidos vengan a verlos. Esto es una puerta nueva que se abre para que tus sueños se hagan realidad”, afirmó.
Por último, y rememorando los momentos difíciles que pasó y que acabaron con un final feliz gracias a las gestiones del equipo de Becas, Anuar Safuan recalcó que sus directivos “más que nada son como tu familia. Te hacen sentir como que estás en tu casa, confían en vos y te dan todo el apoyo. Cuando entras a la cancha, a la hora de demostrar a los entrenadores lo que vos sabes, ellos están ahí para alentarte”. “Lorena (Soto), Leticia (Soto), Julio (Beachy) y todo el equipo hacen que la carga sea menos pesada y te ayudan a resolverlo todo”, sentenció.
